Calvo: «La Ley del Libro es un éxito y un atrevimiento»

Así como abordó el «desafío» al que debe enfrentarse el sector cultural español (que ya supone el 3,5 por ciento del PIB), que no es otro que la adaptación a las nuevas tecnologías. En su discurso, Calvo no dudó en calificar el nuevo proyecto de la Ley de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas como «un éxito y un atrevimiento» pues, a diferencia de la normativa existente desde 1975, el nuevo texto convierte «en protagonistas a las bibliotecas, los creadores y a los lectores, y no es meramente empresarial» como el anterior. También se refirió a la vertiente más «polémica» de la Ley, al otorgar «precio libre» para los libros de texto de la enseñanza obligatoria. «Es innegable que…

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Así como abordó el «desafío» al que debe enfrentarse el sector cultural español (que ya supone el 3,5 por ciento del PIB), que no es otro que la adaptación a las nuevas tecnologías. En su discurso, Calvo no dudó en calificar el nuevo proyecto de la Ley de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas como «un éxito y un atrevimiento» pues, a diferencia de la normativa existente desde 1975, el nuevo texto convierte «en protagonistas a las bibliotecas, los creadores y a los lectores, y no es meramente empresarial» como el anterior. También se refirió a la vertiente más «polémica» de la Ley, al otorgar «precio libre» para los libros de texto de la enseñanza obligatoria. «Es innegable que el sistema de precio libre introduce una competencia que es favorable para el ciudadano y al mismo tiempo no perjudica al librero minorista, con lo que se protege a la red de librerías existentes y se salvaguarda una oferta cultural diversificada». La ministra incidió en la «convulsión» que supone en el sector cultural la revolución digital derivada de las nuevas tecnologías, que se traduce en la generación de nuevos hábitos de consumo. Algo que afecta tanto al sector del libro, a través de internet, la edición electrónica (el libro electrónico y las bibliotecas virtuales), y la impresión bajo demanda; así como al del cine, también a través de internet, la telefonía móvil (la «cuarta pantalla») y las plataformas digitales. Asimismo, entre los objetivos del anteproyecto de la Ley del Cine, Calvo señaló, además de la adaptación a las nuevas tecnologías, la promoción de los productores, distribuidores y exhibidores independientes; el equilibrio de las fuerzas del mercado, y el apoyo a los creadores.